Limpieza de un derribo

Desde septiembre de 2017 he empeorado, ya lo he dejado reflejado aquí. Ni el tratamiento de la estimulación transcraneal, ni el de la lidocaina o mi propia cabezonería han podido llevarme al estado en el que permanecía antes.
Y si, me acabo de dar cuenta. Debería haber gritado: "Eureka". Mi interior estaba desasosegado, truncado, algo a lo que no sabia poner nombre me impedía estar conforme.
Somos tan vanidosos que creemos que podemos volver al momento en donde se agravó todo y no es así, el cuerpo impone su ley.
Llevo más de un año creyendo en el fondo que podría mejorar. Resistiéndome en mi esencia como al que atan y a pesar de saber que está bien sujeto se resiste, se arquea y patalea. ¿Para qué?
Siempre albergamos una esperanza,aunque no esté en nuestros planes. En realidad estos tratamientos y mi obstinación han hecho que me levante de la cama y del sofá y pueda caminar algo, ir a la farmacia o incluso cocinar un menú rápido.Lo que he conseguido también es que el dolor infame me deje leer algo de una asignatura muy bonita de la carrera que quiero continuar haciendo; Historia del Arte...si al Ogro le parece bien. Todo esto, sabe Dios que lo agradezco. De vivir en la inanición he pasado a tener pan algunos días aprovechando esa leve inercia a mi favor.
Ahora es tiempo de construir unos pensamientos mejor enfocados. Pero tragar este sapo cuesta, entra muy mal.
Soy consciente de que he irrumpido en otra fase; de reinventar lo reinventado con el compromiso de aprovechar y potenciar lo que aún sirve, buscando nuevas maneras de mirar y de vivir.
Y valorando...ay valorando, lo que aún poseo porque igual que mi estado de salud es peor, ésta se puede resentir de nuevo y quedarme con menos capacidades.
Agradeciendo que me ha caído la manzana ( si, porque por mucho que quieras ayudarte si no entiendes lo que te pasa por dentro es más dificil) para dejar de esperar. ¿Qué aguardabas, alma cándida? ¿Un milagro? Se ve que no soy apta para esa bendición.
Ahora toca trabajo de limpieza y adecuación para dejar mis días lo más dignos y primorosos posible. Me va a llevar tiempo, pues llevo más de un año con el subconsciente esperando una cosa y mi cuerpo dándole otra. Es época de redirigir pensamientos y rutinas a pesar de sentirme en ruinas. LLevo trozos del derribo por el pelo, pegados a mi piel y algunos metidos entre mi carne.


Quizá ponga un anuncio que diga:

Se necesita ayuda para limpieza de un derribo
Razón: Aquí




Comentarios

  1. No nos queda otra que pasar a la acción con lo poco que nos quede haciendo uso de nuestra imaginación para hacer aquello que aún humanamente podamos hacer, lo que no, no queda otra que aceptar que se nos pasó el momento, pero como dices cuesta mucho tragar el sapo 😔😡. Ya sabes que estoy aquí, tengo algo de experiencia en recoger escombros y adecentar la zona, llevo muchísimas reconstrucciones, más de las que a mí me gustaría. Un abrazo 🤗

    ResponderEliminar
  2. Ante todo gracias mil por comentar.
    Y por estar ahi. Señoras y señores, esta es mi amiga sabia, la que construye tantas veces, la que escucha y apoya, la que se levanta todos los dias a pesar del dolor q la machaca aún siendo humana.
    Mi heroína, mi hermana.

    ResponderEliminar
  3. María José, si ahora puedes hacer esas pequeñas cosas, que antes no podías,claro que has mejorado. Las pequeñas cosas, para nosotras son muy importantes , así que si, a reconstruirte
    Un abrazo y disfrutalas

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias, Ángeles!! Me alegra mucho que comentes. Lo que pasa es q yo pensaba que iba a mejorar para estar como antes de septiembre de 2017 pero no ha sido asi por eso tengo que reconstruir.
      Las pequeñas cosas para nosotras son un mundo.
      Besos mil.😙😙

      Eliminar
  4. Hola María!!! No estás sola.... Llevo mucho tiempo igual que tú. Es como si nada estuviese en su lugar ni en la mente ni en el cuerpo, mucho menos.
    Es que te leo y leo mis días. Y uno sigue, aunque se arrastre. Aún mis exigencias a mi misma, siguen en pie. No niego jamás que hay días muy duros. Pero, hay un refrán que dice que " Lo mejor que hizo Dios, fue un día detrás de otro". Y esa es mi esperanza, mi fe. Que el día siguiente, sea mejor.
    Un besito 😘 María!
    No te rindas porfa🌷🌷

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias, Deborah. Me ha llegado muy dentro tu comentario. No, no m rindo aunque como dices hay dias muy muy duros. Sé que no estoy sola🙄
      Y si, un dia detrás del otro... t mando todo mi amor.😙😙😙😙

      Eliminar
  5. Yo María José no pienso en el futuro, quizás porque no lo quiero imaginar y así no sufrir.
    Hay días, muchos, en los que pienso: “ si no hubiese hecho esto o aquello, hoy no estaría tan mal” pero sea cierto o no, ya no puedo hacer nada. Me conformo con las pequeñas cosas, porque si doy un paseo me quedo para el derribo, como dices tú.
    Aún así doliendo hasta las entrañas, quiero contaros que tengo una compañera en La sesiones de Mindfunnes que está como nosotras, no puede tomar medicamento y además es ciega. Quien no se consuela...Tqm Paquita

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias, Paquita. Si, nuestras vidas son muy duras y pueden ser peor. Por eso lo de valorar lo poquito que hacemos.
      Yo también miro a ver qué he hecho " mal" para esa mala noche para ese pico alto de dolor. Quizá no haya respuesta, el dolor crónico es asi de ca....
      Mil besos😙😙😙😙

      Eliminar

Publicar un comentario

Entradas populares