Bella, ciao

A Martha y a Raúl.

Hola, Feliz Año que no nos hemos "visto"

La primera entrada del año en el blog quería que tuviera cierta fuerza, esperanza ( aunque esa palabra está poco en mi diccionario) o fe. Es así, hemos de llevar esto lo mejor que nos dejen nuestras fuerzas. Así que vamos a ello.

No se si sabéis que una serie española" La casa de papel" se ha llevado varios premios pero entre ellos el más famoso es el Emmy Internacional. Esta ficción la emitió Antena 3 hace un tiempo y actualmente también se puede ver en Netflix, siendo su serie de habla no inglesa más vista.

El argumento es el de un grupo de personajes que reunidos en torno a la figura de uno de los protagonistas"El Profesor"deciden atracar la Fábrica de Moneda y timbre, estar allí unos días imprimiendo su propia moneda y llevarse bastante millones de euros.Cada personaje tiene su historia, la mayoría son perdedores, muchos están llevados al límite. Pero como cuenta la narradora: La vida del profesor giró en torno solo a una idea: resistencia. ¿Os suena el concepto, verdad?

No es que quiera comparar la acción de estos protagonistas con nuestra vida de dolor y enfermedad pero me vale para sacar la esencia de toda actuación en la vida que requiera eso: Resistencia.

La canción "Bella, ciao" sale en varias ocasiones de la serie. Y en realidad, es lo que más me emocionó de la experiencia estética. Os dejo la letra original y la traducida AQUI ENLACE, 

Es más, se convierte en una especie de himno, lo cual creo era su intención en origen. A este tema se le atribuye haber sido una canción cantada por el movimiento partisano en la Segunda Guerra mundial cuando luchaban contra los fascistas y nazis. Es decir, un tema de resistencia.

Y aquí quería llegar yo. Al ver el drama y escuchar la canción, me sentí identificada con ese concepto de resistencia.Está claro que gracias a Dios no estamos en la situación horrible de una guerra en la calle y es cierto, que cada vez menos me gustan las metáforas bélicas relacionadas con mi enfermedad, pero tristemente lo son aunque no quiero abusar de ellas.

Porque mi psicóloga me dijo el otro día en pleno ataque de ansiedad que esa noche cuando me acostase "habría vencido otra vez al dolor crónico", mi día a día es un aguante contra mi misma: María José contra María José, la que quiere vivir y la que tiene las emociones negativas que trae aparejadas el dolor crónico insistente, esa lucha que cada día libro por mantenerme cuerda cuando las embestidas son más inaguantables. Todo eso es resistencia. Y por supuesto activa.

Cada uno a su manera como decía Sinatra, como me comentaba ayer una compañera y amiga Marta de #pacientesquecuentan: lo nuestro, nuestra contienda ya parece "normal" porque no tenemos más remedio pero no lo es. Y yo añado, es verdad, la resistencia diaria siempre es excepcional.

Pero también, como contrapartida me gustaría poner en valor el consejo que me dio el otro día mi farmacéutico cuando le repliqué que desde la salud es muy fácil dar consejos. Me dijo que salud puede ser una sonrisa, soñar o el propio esfuerzo en la dificultad. La famosa resistencia de la que hablo. 

No se, lo dejo a vuestro criterio de si lleva razón mi farmacéutico. El caso es que somos doctos en resistencia.

Os dejo un vídeo con la parte en que cantan la famosa y motivante canción de Bella, Ciao los protagonistas de la serie. Merece la pena verlo.