¿Otra pérdida?


Hoy voy a hablar de un tema que me escuece, me pincha y me quema como mi dolor físico. Se trata del deterioro cognitivo que percibo desde hace casi un año.
Y no, no son los olvidos, que también, se trata de:
Momentos en los que leo, hago una entrada del blog, estoy en redes sociales,escucho una clase, realizo la compra semanal por internet....etc  ante esto me suceden dos cosas.
Se me incrementa el dolor o bien llego a un estado de fatiga extrema cerebral ( como si no hubiera dormido esa noche o como si tuviera agujetas cerebrales)  ya por supuesto, ni ese día ni el siguiente al menos puedo poner mi cabeza a hacer alguna actividad intelectual.



He llegado a cogerle miedo a un libro. Miedo que voy superando jugando con los tiempos.
Ahora estoy en media hora como mucho. Esta entrada, por ejemplo se me ha dilatado en el tiempo. Y ahora que cogía el ordenador, lo hacía con mucho respeto, despacito, llorando.
Quiero volver a mi asignatura sin sufrir demasiadas consecuencias. Quien siga este blog sabe que me embarqué en una nueva carrera: Historia del Arte, la cual comencé para salir de la depresión. Quiero aprender, hacer cosas con mi mente en esta nueva etapa de la vida.
Esta situación me ha desconcertado. Las consecuencias de mi dolor físico: el propio dolor emocional, el estar muy limitada físicamente, el olvidar cosas continuamente, el llevar una conversación es un gran esfuerzo. Y yo me pregunto: pero ¿esto también? ¿otra pérdida? 
Me dicen que es de la medicación, pero no ha variado nada en años.¿Por qué me pasa esto?


Siempre hablo desde mi experiencia pero esta vez os dejo un trocito de un artículo de investigación "El deterioro cognitivo: un factor a tener en cuenta en la evaluación e intervención de pacientes con dolor crónico" de la Cátedra Externa del dolor Fundación Grunental- Universidad de Cádiz que dice:

 " El dolor crónico consume una porción de los recursos atencionales que son limitados, es decir, actuaría como un proceso que requiere un control consciente. Este tipo de procesos controlados están sometidos a limitaciones de capacidad, es decir, solo puede ocurrir una sola secuencia al mismo tiempo sin que haya interferencias. En otras palabras, cuando se requiere de varios procesos controlados a la vez, ellos mismos compiten por la total atención. Se priorizará aquel que más atención requiera, dando paso a un detrimento de un proceso paralelo. Así parece que la experiencia dolorosa junto a un alto grado de ansiedad, son un foco que capta demasiada atención conviertiéndose en un obstáculo para algunas tareas entre ellas la memoria" 

" El dolor y el proceso de memorización y concentración suponen una competencia para los recursos atencionales"


Con esto, entiendo que al tener diariamente un factor tan tremendamente estresante como el dolor crónico mi atención, por ejemplo ha de lidiar con la sensación de dolor y la actividad intelectual que pretenda hacer. Y por eso, se ha resentido considerablemente. Se, porque se ha demostrado con pruebas de imagen que el maldito dolor modifica el cerebro.
Igual que me he acostumbrado a limitar mis actividades físicas, he de hacer lo mismo con las intelectuales. Así escrito parece fácil pero...¿.Por qué también el dolor crónico pone sus colmillos en esto?. Parafraseando al gran Sabina ¿Por qué me roba el mes de abril?
¿ Cómo pudo sucederme a mi?

No soy de no superar miedos y a pesar de los duelos y quebrantos seguiré con mis actividades intelectuales, mal que le pese al Ogro del dolor sin paralizarme, poco a poco, con más maña que fuerza. Prueba de ello es que he terminado esta entrada. 


Comentarios

  1. Comparto lo que dices, lo sufro en mi día a día. Mi cerebro está tan ocupado por hacer consciente que hay algo que no va bien en mi cuerpo que no deja sitio para nada, el muy pesado🤬. Como dices, no hay otra que aceptar y jugar con los tiempos, no dejar de ejercitarse, ya que lo que no se usa se atrofia aún más, pero son demasiadas las pérdidas que el dolor crónico lleva aparejado.😔😘🍏.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Exacto, son demasiadas pérdidas. Y hay que reponerse a cada una de ellas, porque ay si no lo haces. Seguiremos ejercitándonos .
      Gracias por tu comentario, amiga.

      Eliminar
  2. Hola María José
    Te comprendo y te admiro
    Yo hace 5 años que soy incapaz de leer un libro cuando era lo que más me gustaba
    Admiro tu teson y tu fuerza de voluntad al ser capaz de seguir estudiando una carrera
    Persiste amiga, lo conseguirás
    Un fuerte abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola, cariño. Muchas gracias pero como cuento voy muy despacito. Siento que no puedas leer como antes. Cuántas pérdidas lleva aparejadas el dolor crónico.
      Gracias por escribir y tus palabras de aliento. Mil besos

      Eliminar
  3. María José haces mucho, eso tenlo por seguro. Porque todo cuesta más, mucho más. Empecé a leer La hija del Relojero, pero lo he tenido que aparcar, porque tiene demasiados nombres en inglés y me pierdo. No sé si lo podré acabar. Cierto es, que los lectores solemos tener periodos en los que no podemos leer nada más.
    Yo he leído libros tan buenos que ahora no encuentro nada a la altura.
    Referente al tabaco yo también quiero dejar. Tengo una bronquitis que me tiene matada.
    No sé que decirte pequeña mia porque estoy agotada. Te mando un beso Paquita

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias, cariño por comentar. Perdóname por contestarte tan tarde. Siento que hayas tenido que dejar el libro. Son demasiadas cosas...te envío el mayor abrazo del mundo

      Eliminar

Publicar un comentario

Entradas populares